Hola habibis y habibatis,
¿Qué tal habéis terminado la semana y el mes? ¿Lleváis un balance positivo de lo que va de año?
Yo, por ahora, no me puedo quejar... aunque he de reconocer que estos dos primeros meses del año se me han pasado "volando"... La frase de "la vida es un respiro", cada día es más cierta!!! :(
Cambiando de tema... hace un mes, más o menos, les propuse a mis alumnos, que me escribieran un microrelato utilizando seis palabras claves (ladrón-maleta-beso-Salamanca-calcetín-tortuga), ¿os acordáis?...
Pues bien, mi querida amiga Rebeca, me sorprendió escribiendo y dedicándome su fantástica historia, y aún no la había compartido con vosotros y me gustaría hacerlo... ¡¡Muchísimas gracias Ribqah, me hizo mucha ilusión!! :)
"El cuento de las 6 palabras de Lusika"
"Esta mañana, cuando las farolas todavía iluminaban, caminaba por las calles de esta ciudad, que en poco se parece a Salamanca, salvo por la espesa niebla que cubre, oculta y disfraza los edificios en un día de invierno como este.
Al girar en una esquina tropecé con un bulto que casi acaba con mis huesos por tierra. Cuando recuperé el equilibrio y despejé la vista contemplé con curiosidad una vieja maleta cubierta de pegatinas a modo de parches.
Con el golpe se había destartalado un poco más y la tapa dejaba ver en su interior un calcetín. Además, algo se movía. No sabía que hacer, ¿qué podía ser? Con cuidado retiré el calcetín y pude ver al ser vivo que se ocultaba entre otros objetos. Hurgué entre las otras cosas y encontré una tortuga. Me acordé de Casiopea, que guiaba a Momo por Roma.
La saqué con cuidado y la coloqué sobre la acera. Mi intención era saber que más podía encontrar en la maleta. De repente, escuché pasos detrás de mí, pero el miedo me impedía girar la cabeza para comprobar quien se acercaba con poco sigilo. El corazón iba acelerando el ritmo a la vez que los pasos se acercaban más y más a mí. Me puse en lo peor. Pensé que sería un ladrón, que quería hacerse con lo poco que yo llevaba encima y el supuesto tesoro con el que me había tropezado.
Más y más cerca, los pasos estaban a punto de alcanzar mi sombra. La respiración se entrecortaba. Los latidos retumbaban en mi cabeza. Me zumban los oídos. Una mano en mi hombro. Me siento morir. Giro poco a poco. Y encuentro un pacífico anciano que clava su mirada en mí. Con su rostro lleno de desesperación, va relajando su expresión, mientras mira de arriba a abajo. Mira al animal sobre las frías baldosas. Destensa los músculos. Dibuja una sonrisa y planta un sonoro beso sobre mi frente en señal de agradecimiento por haber rescatado al único ser querido que le queda sobre la tierra, su tortuga casi centenaria, como él."
Pues nada, con esta gran historia, os dejo y os deseo un feliz fin de semana!!
Un besazo :)
Foto: El increíble y fascinante barrio de los curtidores en la laberíntica medina de la ciudad de Fez/Fes. Un verdadero espectáculo para los sentidos. Algo único, que en pocos años seguramente desaparecerá, por la dureza del trabajo.
Simplemente, por ver algo así, ya merece la pena ir a Marruecos!!!!
